PEKÍN, 9 de mayo de 2022 /PRNewswire/ — En el Día Internacional de la Madre, que se celebra el segundo domingo de mayo de cada año, en todo el mundo las personas comparten historias sobre sus madres y expresan su amor y gratitud por la persona que las trajo a este mundo.

Los padres sirven como modelos para los niños, y el presidente chino Xi Jinping no es la excepción.

Recordó historias sobre cómo su madre, Qi Xin, lo ha influenciado a lo largo de su vida.

Nacida en 1926, Qi se unió al Partido Comunista de China (PCC) en 1943 a la edad de 17 años, y se convirtió en una firme defensora de sus valores y creencias.

“Los padres y los adultos mayores deben transmitir una buena moral a sus hijos cuando son jóvenes, a fin de ayudarlos a desarrollar integridad moral y un sentido de buena voluntad que los lleven a convertirse en personas capaces de contribuir al país y a la sociedad en general”, afirmó Qi una vez.

“Servir al país con la mayor lealtad” 

Cuando Xi tenía entre cinco y seis años, su madre le compró libros de imágenes y le contó la historia de Yue Fei, un legendario general que luchó en batallas para defender a su nación con la mayor lealtad durante la Dinastía Song del Sur (1127-1279).

La madre le dijo al niño cómo la madre de Yue Fei tatuó cuatro caracteres chinos, que literalmente se traducen como “servir al país con la mayor lealtad”, en la espalda de su hijo.

“Comenté que debía haber sido muy doloroso tatuarse esas palabras en la espalda”, recordó Xi. “Pero mi madre dijo que, si bien había sido doloroso, a él le sirvieron para aprender esas palabras de memoria”.

Desde entonces, Xi convirtió esas palabras en un objetivo para su vida.

La mayor piedad filial 

Como un hijo piadoso, Xi siempre que tiene tiempo camina y conversa con su madre. En sus estantes hay una foto de él caminando de la mano con ella.

Durante el Festival de Primavera de 2001, Xi, en ese entonces gobernador de la provincia de Fujian en el sudeste de China, no pudo reunirse con sus padres debido a su trabajo.

Qi llamó a su hijo y le aseguró que mientras diera lo mejor de sí en el trabajo, mostraría la mayor piedad filial a ella y a su padre.

Sus palabras de apoyo han inspirado enormemente a Xi a servir al público con el objetivo de lograr que las familias chinas vivan una buena vida.

Xi ha señalado repetidamente que “ama a la gente de la misma forma en que ama a sus padres”.

Transmisión de la tradición familiar 

Qi llevó una vida simple, que se convirtió en una tradición para la familia. Su estilo de vida y la atmósfera familiar guiaron los valores de Xi.

“Una persona que no logre ser incorruptible y autodisciplinada se convertirá en una persona sin agallas. Ten en cuenta que la honestidad es una bendición y la codicia es una maldición al establecer una visión correcta del poder, el estatus y los intereses”, le escribió Qi a Xi en una carta en cierta ocasión para recordarle la autodisciplina.

Xi ha incorporado estas creencias en su ideología y prácticas de gobierno.

En 2000, Qi pasó 40 días visitando el área de la antigua base revolucionaria del PCC en Shaanxi, Gansu y Ningxia. En Zhaojin, el centro de la zona, vio desaliñados salones de clases de una escuela primaria local y movilizó a su familia para donar 150.000 yuanes con el fin de reconstruir la escuela.

En mayo de 2018, los estudiantes de la escuela escribieron una carta a Xi en la que informaron sobre su estudio y el desarrollo de la escuela. Una semana después, el presidente respondió, alentándolos a heredar y transmitir el espíritu del PCC mediante acciones concretas.

Día de la Madre: historias de Xi Jinping y su madre. Los padres son modelos importantes para los niños, y el presidente chino Xi Jinping no es la excepción.

 

FUENTE CGTN